Redacción. «Representa una amenaza a la paz escolar». Esta es la fundamentación alegada por la senadora regional de Educación de Berlín para prohibir los pañuelos palestinos, la kufiya, en los colegios de la capital alemana. Katharina Günther-Wünsch, de la conservadora Unión Cristianodemócrata (CDU), ha prohibido también los símbolos y declaraciones políticas a favor de Hamás en las escuelas, después de que la semana pasada diesen repetidamente lugar a conflictos en las aulas.
«Cualquier conducta demostrativa o expresión de opinión que pueda entenderse como una defensa o aprobación de los ataques contra Israel o un apoyo a las organizaciones terroristas que los llevan a cabo, como Hamás o Hezbolá, representa una amenaza a la paz escolar en la situación actual y está prohibida», ha anunciado, en un comunicado celebrado por la Asociación de Profesores.
Un profesor pateado en el patio del colegio
La semana pasada, un profesor fue agredido y pateado en el suelo del patio del instituto Ernst-Abbe de Neukölln por un alumno al que pretendía retirar la bandera palestina que enarbolaba en el interior del centro escolar. El ataque fue grabado y las imágenes difundidas en las redes sociales, donde fueron motivo de celebración para muchos usuarios.
El incidente ha dejado a los profesores en una situación de indefensa hasta que Günther-Wünsch, con la prohibición, ha reforzado su autoridad. El Consejo Central de Judíos de Berlín ha advertido contra el «antisemitismo desatado» en las escuelas y pide medidas decisivas contra el odio. «Desafortunadamente, el antisemitismo desatado en las escuelas alemanas no nos sorprende», afirma un portavoz, «es un problema que detectamos ya hace tiempo y, ahora, el apoyo al cruel terror de Hamás en Israel muestra una nueva dimensión».
Prohibidas las pegatinas alusivas a Palestina
En la prohibición, además de símbolos directos de Hamás o Hezbolá, así como representaciones y declaraciones que glorifican la violencia, también se incluyen «símbolos, gestos y expresiones de opinión que aún no alcanzan el límite de la responsabilidad penal», ha explicado Günther-Wünsch.
Se refiere, por ejemplo, a la proclamación de la consigna «Palestina libre», el nombre de una organización propalestina que fue prohibida en Alemania la semana pasada. Las pegatinas con inscripciones como «Palestina libre» o el mapa de Israel con los colores de Palestina, que muchos alumnos de origen árabe lucen en sus carpetas y en sus mochilas, quedan también prohibidos.
«Tales acciones y símbolos ponen en peligro la paz escolar, lo que dificulta la educación en un estado de libertad y resolución de conflictos por medio del diálogo que permita procesos escolares adecuados, para que se pueda cumplir el mandato educativo y de crianza del Estado», alega la senadora.
Este propósito protector, insiste, es de extraordinaria importancia. «Evitar conflictos políticos y religioso-ideológicos en las escuelas representa un bien común importante que justifica una restricción de la libertad de expresión», argumenta. En este contexto, las escuelas también podrían prohibir el uso de teléfonos móviles a todos los alumnos, si se supiera que en el centro se están utilizando para difundir propaganda terrorista.
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La oposición, en contra de la medida
La oposición regional del Partido Socialdemócrata de Berlín (SPD) se ha mostrado en desacuerdo con esta medida. Acusan a la senadora de Educación de una «prohibición indiferenciada».
Los portavoces de política educativa Maja Lasic y Marcel Hopp responden que una prohibición general de símbolos, gestos y expresiones. Siempre que identifiquen fundamentalmente con Palestina equipara «a la organización terrorista Hamás con posiciones moderadas, legítimas y constitucionalmente protegidas desde una perspectiva palestina».
«Una prohibición tan desproporcionada parece constitucionalmente dudosa e inadecuada para mantener la paz en la escuela», repiten. Además, sugieren que se deben tomar más medidas para promover la democracia y combatir el antisemitismo y la discriminación.
El diputado socialdemócrata Hakan Demir, añadió que «la prohibición anunciada de actividades contra Hamás. Y también las prohibiciones en Alemania de asociaciones favorables a Hamás y de la red palestina Samidoun son correctas. Pero no está bien prohibir los símbolos palestinos legales en todos los ámbitos».
Muchos padres judíos evitan esta semana enviar a sus hijos al colegio. Consideran que no está garantizada su seguridad después de los actos antisemitas que se repiten por toda la ciudad. Estos incluyen pintadas en los restos del Muro de Berlín, estrellas de David marcando las puertas de viviendas e instalaciones judías. Además de grupos de escolares que acosan abiertamente a los niños judíos. «Nuestra escuela está prácticamente vacía», han informado los profesores de un instituto judío de Berlín en una carta al alcalde, Kai Wegner.
