Choloma. La alcaldía de Choloma que dirige Gustavo Mejía mantiene a la espera a unos 500 emprendedores de la micro, pequeña y mediana empresa (mypimes) debido a la tardanza en la aprobación de la simplificación de los permisos de operación de negocios en la municipalidad.
Este proceso aliviaría el bolsillo de este grupo de comerciantes pues ya no tendrían que pagar impuestos mensuales como los que pagan las grandes empresas.
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En la actualidad, para emprender un negocio a un comerciante del sector mypimes le toca cumplir una exigente lista de 25 requisitos municipales. Estas obligaciones no están clasificadas por rubro y por tamaño de la empresa, representando un atraso para la economía local.
La falta de nuevas inversiones ha desencadenado un aumento en el desempleo entre los cholomeños. Buscando nuevas rutas de alivio económico, muchos ciudadanos deciden emprender su propio negocio para el sustento de su familia y de esta manera poder salir adelante.
Atentos a la problemática y por iniciativa propia, la Cámara de Comercio e Industrias de Choloma (CCICH) promueve a nivel local el tema de la simplificación administrativa para el apoyo de las mypimes. Presentaron la propuesta a la alcaldía que dirige Gustavo Mejía, pero hasta la fecha no han obtenido ninguna respuesta.
Año complicado para las mypimes
“Choloma es un catalizador que año con año recibe a personas desde el interior del país. Buscan oportunidades para el empleo o emprendimiento. El 2024 ha sido un año complicado para el tema del empleo”, reconoció la directora ejecutiva de la Cámara de Comercio e Industrias de Choloma (CCICH), Alejandra Mejía.
La empresaria, añadió que como cámara de comercio brindaron una propuesta y firmaron un acuerdo con la alcaldía que dirige Gustavo Mejía, con el enfoque de simplificar los procesos de permisos de operación de todos estos emprendedores mypimes.
“Estamos en negociación para que sea efectivo, esperamos respuestas, porque ya estamos en mayo, y todavía no hemos logrado que esto se respete”, aseveró.
En ese sentido, la directora de la CCICH hizo un llamado a las autoridades municipales para que brinden una pronta respuesta. Como cámara de comercio en la ruta del desarrollo empresarial subsidian el tema de legalización, formalización y estimulan a los pequeños empresarios, recalcó.
“Cuando se llega a la municipalidad, se llega a una lista de más de 25 requisitos, lo cual es frustrante para el emprendedor porque realmente no puede cumplirlos. Son requisitos que no están ni clasificados por rubro, y por tamaños de la empresa”, explicó.
Alejandra Mejía lamentó que muchas personas, al no encontrar oportunidades, toman la ruta al norte. “Es doloroso porque se nos está marchando para estos países vecinos capital y recurso humano formado”, lamentó.
Un paliativo
Desde la CCICH se está haciendo hincapié en temas de autoempleo y emprendimiento para estimular la generación de autonomía económica.
“Semanalmente hay un derrame económico por la industria maquiladora que paga a sus colaboradores. Esto permite que estos pequeños emprendimientos subsistan de manera permanente en el territorio”, apuntó.
Mencionó que la CCICH también brinda apoyo a las mypimes con la ruta de legalización, acceso de capital semilla, crédito revolvente e intermediación financiera, además de jornadas de capacitación.
“Realmente, esto es un paliativo, no es la respuesta que se requiere. Desde el sector privado hacemos un llamado súper fuerte al gobierno central y local para que pongan en perspectiva el tema de empleo y que sea de prioridad en el país. Sobre todo, el tema de atender desde la gran necesidad de las grandes empresas hasta las pequeñas y medianas”, enfatizó la directora de la CCICH, Alejandra Mejía.
Por otro lado, lamentó que la Ley de Mypimes desde el año pasado esté inactiva. De momento no hay movimiento de que haya una nueva renovación, y tampoco hay incentivos hacia la pequeña y mediana empresa.
“Necesitamos un diálogo transparente, y que se escuche realmente qué es lo requiere el sector privado. Después tomar acciones concretas a corto y mediano plazo. Necesitamos atender desde la gran empresa hasta el emprendedor más pequeño, que se generen incentivos claros y líneas claras de inversión para estimular el tema del empleo e inversión local e internacional”, acotó.
Emprendedores a la espera ayuda de Gustavo Mejía
El comerciante Javier Osman Ramos, de 46 años de edad, es propietario de una empresa de servicios múltiples como instalaciones eléctricas, soldadura y otros. También forma parte de los 500 emprendedores que recibe el sostenimiento necesario de la CCICH. Él sumó su voz al llamado al alcalde Gustavo Mejía para que los apoye en la ruta de la simplificación del permiso de operaciones de negocios en la municipalidad.
“Pedimos al alcalde Gustavo Mejía que nos apoye con los permisos de operaciones porque esto nos afecta. Existen personas que tienen que pagar por estar operando entre 600 a 700 lempiras mensuales. Algunas son pulperías y chicleras”, apuntó el comerciante.
Indicó que las mypimes no quieren ser una carga para la comunidad, por el contrario, entre sus aspiraciones está ayudar al robustecimiento económico de Choloma.
“Somos emprendedores y venimos comenzando. Lastimosamente a los pequeños emprendedores no nos escuchan; queremos que escuchen al pueblo y nos apoyen”, finalizó Ramos.