Redacción. Alrededor del 80% de las víctimas de trata de personas son reclutadas a través de plataformas digitales.
El Ministerio Público, que combate estos ilícitos a través de la Unidad Contra la Trata, Explotación Sexual Comercial y Tráfico de Personas (UTESCTP), confirmó este dato.
Uno de los crímenes que más se ha incrementado y que continúa en ascenso es la trata de personas. En muchos casos, las redes criminales captan a menores de edad principalmente a través de redes sociales como Instagram, TikTok y Facebook. Estas plataformas las utilizan redes criminales transnacionales que buscan niñas, niños y adolescentes para raptarlos y comercializarlos en el extranjero.
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El modus operandi de estos criminales consiste en el uso de perfiles falsos, haciéndose pasar por jóvenes de edades similares o ligeramente mayores. Inician conversaciones, concretan citas o invitan a las víctimas a sus viviendas, donde finalmente las raptan. Fiscales especializados en trata de personas señalan que el 80 % de los casos de captación ocurre a través de plataformas digitales o páginas de anuncios en redes sociales.
Vigilancia parental
En este 2025, la UTESCTP ha procesado más de 10 casos con este modo de operación. Los captores las contactaron por medios digitales. Todos estos casos se encuentran actualmente encausados con auto de formal procesamiento y prisión preventiva para los implicados.
Ante esta alarmante realidad, las autoridades recomiendan no proporcionar aparatos electrónicos a menores hasta que cumplan los 18 años. En caso contrario, los padres deben mantener una vigilancia permanente del uso de redes sociales y videojuegos. Así mismo, de otras plataformas que puedan ser atractivas para los jóvenes.
Hace unos días, la Policía de Fronteras rescató en El Amatillo, Valle, a una niña de 14 años desaparecida en Nicaragua. Un extraño contactó a la joven a través de Facebook y TikTok.
Entre enero y marzo de este año, el Ministerio Público rescató a unas 25 víctimas, en su mayoría niñas, niños y adolescentes. Los afectados eran víctimas de explotación laboral y sexual, tanto dentro como fuera del país.
Todas ellas se encontraban en condiciones precarias y algunas fueron enviadas al Equipo de Respuesta Inmediata (ERI) de la Comisión Interinstitucional Contra la Explotación Sexual Comercial y Trata de Personas (CICESCT) y la Secretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF) para recibir el apoyo necesario.