TEGUCIGALPA, HONDURAS. Al menos 58 transportistas han muerto de manera violenta en lo que va del 2022, informó el Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH).
El director de la Policía Nacional, Gustavo Sánchez, manifestó que el problema de la extorsión es el principal peligro que enfrentan los conductores de este servicio.
«La problemática de la extorsión en el país es muy seria, es muy grave. Nosotros hemos estado haciendo un replanteamiento de la estrategia», indicó.
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Asimismo, Sánchez aseguró que la institución policial tomó posesión del área apenas hace unos meses.
«En ese replanteamiento se auxilia de la prevención con la Fuerza Nacional de Seguridad y Transporte. Hicimos el lanzamiento de Los Cobras para las operaciones tácticas en contra de estos grupos», explicó el uniformado.
Por su parte, el dirigente de transporte, Jorge Lanza, aseguró que para este rubro es imposible mantener ese ciclo extorsivo.
«No se le puede negar lo que piden. Entre más piden, más quieren y es imposible. Se puede decir que este negocio es un dolor de cabeza constante, esto lo puede llevar hasta la muerte a uno», indicó.
Sector transporte paga hasta L35 millones al mes por extorsión
Millonarias cantidades de lempiras pagan mensualmente los transportistas al crimen organizado por concepto de extorsión, también conocido como «impuesto de guerra», así lo detalló el dirigente, Jorge Lanza.
De acuerdo con el dirigente del rubro en la capital de la República, los propietarios de buses y taxis dan al mes entre 25 y 35 millones de lempiras a las estructuras criminales. De la misma manera, Lanza destacó que este flagelo ha ido en aumento en las últimas semanas.
En tan sentido, el dirigente dijo en HRN, «ahorita se ha incrementado; hay lugares que están pagando tres (3) rentas«. A la vez, refirió que en total se vienen pagando entre 25 y 35 millones de lempiras mensuales solo del transporte urbano a la extorsión.
Lanza aseguró que esta situación que los aqueja desde hace tiempo se ha vuelto imparable e insoportable. Asimismo, enfatizó que el crimen organizado es insaciable y reclaman constantemente el dinero a sus víctimas.
Jorge Lanza también destacó que como transportistas tienen que pagar a los extorsionadores la cantidad que les exigen y no se pueden pasar del día establecido, por lo que lamentó que se ha vuelto difícil.
