SAN PEDRO SULA. Hugo Sánchez era el administrador del Centro Penal y uno de los acribillados cerca de un mall.
El hecho violento se dio cuando iba junto a su compañero de trabajo y otro recluso.
Información preliminar indica que sujetos fuertemente armados atacaron a balazos a los que se conducían en el 3.0, quedando casi destruido.
La Policía está investigando si Sánchez como administrador del Penal era el objetivo de los malvivientes.
O bien uno de los reos, quien al parecer era parte de banda «Los Aguacates».
Según se informó, dos de ellos murieron en el interior de un vehículo y otra en el parqueo de un negocio de comidas rápidas.
En tanto otro hombre fue llevado a la sala de Emergencias del Mario Catarino Rivas.
Se dice que se trata de un guardia de seguridad privada que nada tenía que ver con el suceso.
Agentes se apersonaron al lugar para iniciar con las primeras pesquisas del hecho, el cuarto de este tipo en las últimas 48 horas.
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Personal de Medicina Forense se trasladó al lugar para realizar el debido reconocimiento y levantamiento de los cadáveres.
SÉPALO
De acuerdo a las versiones de la Policía, las últimas tres masacres registradas en Honduras.
Se deben al pleito de territorios para la venta de drogas y disputas de grupos criminales, aunque se investigan otras hipótesis.
Para el caso, la masacre en Siguatepeque que dejó a 4 hombres y 2 mujeres muertas.
La investigación policial establece que proviene de estructuras criminales organizadas.
Que en su afán de poder dentro de las asociaciones ilícitas a las que pertenecen originan hechos de muertes múltiples.
Tres cartas de libertad de los ahora occisos por secuestro, asociación ilícita, portación ilegal de armas y extorsión.
Además se requisó para su investigación un cargador para arma de fuego, varios celulares y casquillos de arma de fuego de 9 milímetros.
Masacres en Honduras
Hasta el momento, de las personas fallecidas, la Policía ha identificado plenamente mediante un proceso técnico-científico a:
Karen Lorena Rodríguez Cárcamo (40), Alexis Mauricio Villanueva (38), quien presentaba tatuajes alusivos a pandillas.
Mientras que los otros nombres son: Wilmer Antonio Garay Bautista (31), Carlos Eduardo conocido como “El Pelón”.
María del Carmen Villanueva (63), Francisco Eduardo Mejía (21) y un herido el cual por razones de seguridad se omite su nombre.
Enfáticamente las investigaciones determinan que de los hoy occisos las dos féminas, no tienen ningún antecedente penal ni policial.
Mientras que los otros cinco ciudadanos sí los tienen por delitos de secuestro, asociación ilícita, portación ilegal de armas y extorsión.
Según la información de la Policía, los cuatro sujetos que perecieron y el herido integraban una banda que operaba en la zona nor-occidental.
Tres de ellos salieron libres de la Penitenciaria Nacional de Támara, Francisco Morazán, siendo recibidos en las afueras de dicho reclusorio.
Por los otros cuatro acompañantes con el fin de ser trasladados a su lugar de origen San Pedro Sula.
Donde horas después se reportó a la altura al desvió a la Esperanza, Intibucá el hecho antes referido.
