ESTADOS UNIDOS. Ayer, el embajador hondureño ante la Organización de Estados Americanos (OEA), fue acusado de «usurpador y golpista».
El conflicto surgió luego de que internamente el embajador hondureño convocara y presidiera la reunión del Consejo Permanente de la OEA. El consejo fue citado para tratar la crisis venezolana. La cita debió ser convocada por el actual presidente de la OEA que le recorresponde al representante de Bolivia.
En ese sentido, el hondureño Leonidas Rosa Bautista, asumió la posición concerniente al boliviano, Diego Pary Rodríguez. Este último es el actual y permanente jefe en presidencia del Consejo Permanente de la OEA.
La presencia de Rosa Bautista presidiendo la sesión de ayer fue calificada como «golpe institucional» porque fue el hondureño junto a otros embajadores quienes convocaron a reunión.
Además, al llegar Diego Pary, en su puesto, estaba Leonidas Rosa, dirigiendo la reunión oficial de la OEA.
Ante el reclamo del boliviano, el hondureño expresó a Diego Pary: «puede asumir la presidencia cuando guste. Yo solo estoy de manera interina. Por razones reglamentarias tuvimos la cortesía de acceder a ella antes de iniciar la agenda».
Durante la sesión hubo mucha tensión y el legal presidente, el boliviano, se refirió al embajador hondureño en tono de decepción:
«Bolivia lamenta pues, que un país amigo (Honduras), hoy asuma de manera golpista la presidencia del Consejo Permanente de la OEA. Mi país no puede aceptar, de ninguna manera, que la presidencia que le corresponde a Bolivia pueda ser usurpada. Bolivia es un país digno, soberano, independiente, y en ese sentido, exige el respeto a su derecho. Este es un organismo multilateral; lo que se ha hecho es vulnerar toda la normativa de la organización. Hoy lo que se está dando en la OEA es un golpe institucional a la presidencia de este Consejo Permanente.»
«Hoy lo que está sucediendo es desconocer todas las normas internacionales y eso debe conocer el mundo y debe conocer todo continente. Bolivia no acepta de ninguna manera que agredan a su soberanía. Bolivia es un país digno y en cualquier espacio defenderá este su derecho.», agregó.
«Y no solamente han agredido al estado que ostenta la presidencia; sino también han desconocido al vicepresidente de este Consejo Permanente. Que es el representante permanente de la República de Haití; aparte de ello, también desconocen al decano de este Consejo Permanente, que justamente es mi persona. Estoy ejerciendo plenamente mis responsabilidades y estoy en este momento en la sede de mis funciones y en la Organización de los Estados Americanos», añadió
«Su convocatoria, su dirección. Aquí hay una convocatoria que usted ha circulado como presidente de este Consejo Permanente. Esta su convocatoria es ilegal, es trucha y la desconocemos totalmente. Por lo tanto, este consejo es ilegal y lo que se ha hecho en la OEA es un golpe institucional, desconociendo la presidencia de este consejo», finalizó.
Sin embargo, eso no fue todo, puesto a que el embajador de Venezuela se unió a la protesta en contra del hondureño.
EMBAJADOR HONDUREÑO EN EL OJO DEL HURACÁN
«Aquí está la canciller de Argentina hablando sobre Venezuela sin nuestro permiso. Violando toda la normativa de la OEA», dijo el venezolano.
Asimismo, citó el artículo número uno de sus normativas que prohíbe hablar sobre algún estado sin el consentimiento de su representante.
«Están dando un Golpe de Estado en la OEA», dijo el representante de Venezuela, con molestia. Agregando que el mundo debía conocer sobre esto.
Finalmente, ante tal situación, Jean Michel Arrighi, el asesor jurídico de la OEA, expresó algunas cosas al respecto. Él dijo:
«El Consejo puede comenzar porque hay quórum (un tercio de los 35 Estados miembros, es decir, al menos 12 están presentes); y que, al no estar el presidente (Bolivia) ni el vicepresidente (Haití), le corresponde presidirla al embajador titular con más antigüedad en la organización.»
El embajador de Bolivia, Diego Pary, lleva en la OEA desde el 13 de mayo de 2011; mientras que el embajador de Honduras, Leonidas Rosa Bautista, ingresó el 31 de octubre de ese año.
