Redacción. El Poder Judicial (PJ), mediante un Juzgado en Materia de Criminalidad Organizada y Corrupción, dictaminó auto de formal procesamiento con la medida de prisión preventiva contra nueve ciudadanas acusadas del asesinato de 46 mujeres en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS).
Las imputadas, integrantes de la Pandilla 18, habrían cometido los delitos de asociación para delinquir, asesinato, asesinato en su grado de ejecución de tentativa inacabada, incendio cualificado, porte ilegal de arma de fuego prohibida y permitida, y asesinato múltiple de 46 mujeres en PNFAS.
Las reclusas acusadas son:
- Claudia María Lemus Aceituno
- Lesbia Ondina Rodríguez Orellana
- Cherry Darling Guevara
- Heidy Jackeline y Palma Rivera
- Karen Lorena Ávila Pavón
- Leyla Rosmeri Figueroa Pavón
- Susana Godoy Leiva
- Arleny Sarai Guerra Portillo
- Francis Margarita Chavarría Ávila.
El Poder Judicial determinó esta sentencia luego de llevarse a cabo una audiencia inicial, realizada de forma virtual. Se evacuaron los medios de prueba que presentaron las partes procesales durante la audiencia.
Una vez culminada la audiencia, los jueces lograron determinar la participación de las acusadas en los hechos que se les atribuyen.
Las imputadas serán remitidas al Centro Penitenciario de la Tolva, ubicado en Moroceli, departamento de El Paraíso.
Cronología de los hechos
Según la Sección de Muertes Cometidas por Estructuras Criminales Organizadas de la FEDCV junto a la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), el hecho ocurrió el pasado 20 de junio 2023, aproximadamente a las 7:45 de la mañana.
Las implicadas, pertenecientes al módulo 6 y 7, utilizaron armas de fuego, incluso objetos cortopunzantes, para someter a cuatro policías penitenciarias, de acuerdo a la investigación de la FEDCV.
Puedes leer: Identifican a las 3 personas muertas en masacre en Comayagua
Luego, las colocaron boca abajo y las despojaron de las llaves de los módulos, así como de listados de la población carcelaria. Las imputadas habrían consiguido entonces ingresar a los otros espacios donde estaba el resto de las privadas de libertad.
Mientras tanto, otro grupo de la Pandilla 18 rompió los candados para entrar a los módulos del 1 al 4, donde permanecían las integrantes de la Mara Salvatrucha (MS-13).
Después, deshabilitaron las cámaras y prosiguieron a quitarle la vida con múltiples disparos a 23 privadas de libertad.
Desesperación
En un intento por salvar sus vidas, las presas de los módulos invadidos cerraron los portones para evitar el ingreso de las atacantes. Las hechoras, al no tener acceso, rociaron un líquido inflamable y varias féminas murieron incineradas e incluso otras asfixiadas.
Las investigaciones en este caso continúan su curso a fin de involucrar a otras presuntas participantes en los delitos y trabajan en análisis criminalísticos para definir su culpabilidad.