Por eso resulta asombroso que la estrella de Hollywood admita ahora que hay algo en lo que sí está de acuerdo con el lenguaraz empresario, una idea que Salma ha sacado de uno de los muchos libros autobiográficos que Donald Trump ha publicado a lo largo de su vida: la convicción de que el político sigue siendo «aquel niño de primaria» que una vez agredió a su profesor de música.
«Hay una cosa en la que sí coincido con Donald Trump. Él mismo dice en su libro [‘Donald Trump: es el momento de ponernos serios’] que cuando estaba en la escuela le pegó un puñetazo a su profesor de música porque pensaba que no tenía ni idea de lo que les estaba enseñando.
Y poco después, en el mismo libro, reflexiona sobre su infancia y acaba diciendo que en el fondo sigue siendo aquel mismo niño de primaria. Y yo estoy de acuerdo con lo que expresa: está claro que tenemos a un niño abusón como candidato a la presidencia de Estados Unidos», expresó la actriz en el programa de Jimmy Kimmel.
La actriz mexicana también ha querido recordar a Donald Trump que, pese a su deseo de estigmatizar a los inmigrantes latinoamericanos, a los musulmanes y a cualquier otra minoría que no encaje en su limitada visión de lo que constituye ser estadounidense, la multiculturalidad es precisamente un rasgo que define mejor que ningún otro la identidad de Estados Unidos.
«Señor Trump, te recomiendo que te leas este libro, es ‘Historia de Estados Unidos para tontos’. Con mucho gusto le presto yo mi copia», aseguró entre risas.
La diversidad étnica y cultural también juega un papel fundamental en la vida de la propia Salma Hayek, ya que además de ser mexicana de raíces libanesas y españolas, cada miembro de su familia cuenta con el pasaporte de un país diferente.
«Cada vez que llegamos al aeropuerto parecemos esos fugitivos que tienen un montón de identidades falsas, porque yo tengo pasaporte mexicano, mi marido [el empresario François-Henri Pinault] es francés y mi hija [Valentina] tiene ciudadanía estadounidense», bromeó.
