TEGUCIGALPA, HONDURAS. De un 10 % fue la caída del Índice Mensual de Actividad Económica (INAE), de forma acumulada, hasta el primer semestre del 2020, según el Banco Central de Honduras (BCH).
El BCH atribuye la caída al impacto de la crisis sanitaria del COVID-19. En el 2019, en el mismo periodo de tiempo, hubo una contracción de apenas 2.4 %.
Debido a la pandemia del COVID-19, la actividad económica de Honduras se vio afectada por el cierre de empresas debido al toque de queda decretado por el gobierno central como medida de contención del mortal virus.
Según los datos ofrecidos por el BCH, para junio, el indicador mostró una contracción interanual de 13.4 %. En ese sentido, detalla que la caída económica es menor respecto a los resultados de abril y mayo del año en curso. Atribuye los resultados a la reapertura gradual de algunas de las actividades económicas del país.
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Actividades económicas más afectadas por la pandemia del COVID-19
La tendencia de ciclo se ubicó en -12.4 %, mientras que para junio del 2019 se ubicaba en 2.5 %. Según los datos ofrecidos por el BCH, la actividad económica que más se vio afectada fue la industria manufacturera.
La cual refleja una caída de 22.6 %, (alza de 0.4 % en igual período de 2019).
Al igual explica que el impacto se originó por la reducción en la producción de textiles y prendas de vestir, reportando variación de 43.1 %. Mientras que la fabricación de maquinaria y equipo, tuvo una caída de 39.2 %. Estas actividades representan el 77 % de la industria manufacturera.
Su principal problema fue que la demanda de estos productos en el mercado internacional también se vino abajo, sobretodo el de Estados Unidos. A eso, se le suma la paralización de labores de las empresas desde el 16 de marzo.
Pero, hay que recordar que algunas empresas maquiladoras desde junio reiniciaron operaciones. El reinicio se debió a la demanda doméstica en el rubro de la salud, específicamente de la producción de equipos de bioseguridad.
La segunda actividad económica más afectada fue el comercio de bienes y servicios. Según los datos del BCH, denotó una contracción de un 13.2 %. Mientras que, en el mismo periodo del 2019, se situó en 2.3 %.
Una contracción que responde a las bajas ventas en términos de volumen, de bebidas alcohólicas, equipo de transportes, prendas de vestir. A eso hay que sumarle la caída de compras de aparatos de uso doméstico, productos ferreteros y derivados del petróleo.
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