TEGUCIGALPA. Tras la noticia de la captura de un hombre que tenía secuestrada a una mujer, el abogado defensor asegura que no hubo secuestro que solo fue un caso de violencia intrafamiliar.
En este sentido, Carlos Ordóñez, aseguró que en este caso «hubo un problema de pareja; pero este es un delito de violencia intrafamiliar y no un secuestro».
Detalló: «ayer tuvimos la audiencia de declaración de imputados de Jorge Arturo Cruz Lozano, fue detenido por secuestrar una mujer. A la señora Erminda de los Ángeles Martínez Valeriano«.
«La señora Erlinda tiene 17 años de vivir con el señor Cruz Lozano y lo que había era un problema de pareja. Al llegar a su casa de habitación tuvieron un problema de violencia intrafamiliar y discutieron por situaciones ajenas que no se pueden ventilar».
Abogado defensor: No hubo secuestro
Según trascendió, el escrito de los Juzgados capitalinos indica que ella interpuso la denuncia, ya que estaba «secuestrada».
Parafraseando el documento dice que ella fue mandada a traer por el detenido -esposo- con dos hombres. Luego entró a la casa y cerró los portones, puso los dos hombres a vigilar. Tras ver lo ocurrido subió a la tercera planta de la casa donde hay una puerta de hierro, se encerró y pidió auxilio. Minutos después llegó la policía a rescatarla.
Sépalo
Indicó que este delito se paga con una una pena de tres a seis años de cárcel que es fiable. Sin embargo, todavía se desconoce si será aplicada.
Antecedentes
En otra nota, días atrás investigaciones de la Dirección Policial de Investigación (DPI), dieron paso para dictar formal procesamiento a un ciudadano acusado de violencia intrafamiliar.
Wilfredo Aguilar Banegas, de 37 años, fue hallado culpable de arremeter violentamente en contra de su esposa y su hija. A raíz de las repetidas agresiones, la perjudicada interpuso la denuncia a las respectivas autoridades.
Reconstrucción de la escena
El pasado 14 de febrero, la DPI, realizó investigaciones en el caso. Donde se dedujo que la dama se encontraba en su casa de habitación junto con la menor y el detenido.
El detenido se drogó en su casa, por lo que la ofendida le solicitó que dejara de hacerlo. Pero molesto por su exigencia este comenzó a agredirla físicamente.
Posteriormente, llevó a la victima por la fuerza a unos de los cuartos para obligarla a tener relaciones sexuales con él.
Al escuchar los gritos, la menor le decía a su madre que se saliera de la habitación. La hija le exigió a su padre que no le hiciera daño ya que lo denunciaría.
Al oír las amenazas por parte de la menor, Banegas intentó agredirla, a lo que su madre intervino. Las acciones de ira en contra de la féminas, fueron detenidas por los vecinos del lugar.
