TEGUCIGALPA, HONDURAS. La madre del bebé recién nacido, localizado abandonado el pasado viernes en Tatumbla, Francisco Morazán, ya está en poder de las autoridades judiciales hondureñas y estaría enfrentando cargos por la acción que cometió.
A esta mujer, junto a quien sería su pareja, les dieron captura el pasado sábado en la aldea de Linaca, en el mismo término municipal. La acción se ejecutó tras las indagaciones de parte de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), a tan solo horas de encontrar al bebé en el sector de Palo Alto.
La sospechosa es Miriam Suyapa Matamoros Rivera, de 39 años de edad, originaria y residente de la misma aldea. A ella se le presume responsable del delito de parricidio en su grado de ejecución de tentativa acabada.
Tipificación del delito
El Código Penal de Honduras establece que el parricidio significa quitarle la vida de manera violenta a un familiar cercano, entre ellos padre, madre, hermano, cónyuge e hijos.
Entre las principales penas por este ilícito están la prisión con condenas de varios años, además de multas e inhabilitación.
El artículo 123 del Código Penal señala que, «la madre que para ocultar su deshonra da muerte al hijo que no haya cumplido tres (3) días de nacido, será sancionada con seis (6) a nueve (9) años de reclusión».
Por su parte, la pareja de la sospechosa enfrenta cargos por suponerle responsable del delito de omisión del deber de socorro. En este caso, puede recibir una pena en prisión de 30 a 90 días, más una multa.
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Las evidencias
Por otro lado, la DPI reveló que tras el hallazgo del bebé en Tatumbla, se activó un equipo especializado que se dedicó a las investigaciones en el sitio, para así recopilar las pruebas que sustentan la acusación en contra de la sospechosa.
En ese sentido, se determinó que el hombre requerido y padre del menor, también tuvo un papel en el abandono del bebé.
Del mismo modo, se ejecutó un allanamiento de morada en la vivienda de los sospechosos con la intención de recolectar más indicios que respaldaran las acusaciones. En este procedimiento localizaron:
- Un teléfono celular
- Seis prendas de vestir impregnadas con fluidos corporales que presentaban manchas oscuras, similares a la sangre. Esto añade elementos importantes a la investigación.
Chequeo de la sospechosa
Luego de la captura, a la mujer se le trasladó de emergencia al área de ginecología del Hospital Escuela en Tegucigalpa, para un chequeo y la atención médica necesaria.
Una vez reestablecida, se le remitió ante la fiscalía del Ministerio Público para que se le siga el proceso que demanda la ley y enfrente la justicia por los cargos de parricidio en su grado de tentativa acabada.
Del mismo modo, al padre se le presentó ante el órgano jurisdiccional competente para que responda por el delito que se le imputa.