TEGUCIGALPA, HONDURAS. Un juez de letras dictó la medida de detención judicial a José Humberto Figueroa Martínez, de 61 años, y Dilver Dodanin Figueroa Munguía, de 22, tras ser acusados de la muerte violenta de una anciana y su hijo en Curarén, Francisco Morazán.
Los imputados son precisamente los acusados de quitarle la vida a su hermano/tío y madre/abuela, en medio de una disputa por unas tierras de herencia en el sector de El Anís, jurisdicción antes mencionada.
El hecho violento que conmocionó al municipio y el país completo se registró el pasado martes 25 de marzo en horas de la noche. Tras el levantamiento de los cuerpos, las autoridades policiales iniciaron con las saturaciones y los lograron capturar.
Una vez detenidos, la Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida (FESCCO) presentó el requerimiento fiscal en contra de los dos hombres por el delito de parricidio y asesinato en perjuicio de María Alejandra Martínez García, de 83 años, y Pedro Figueroa Martínez, de 51, y tras la audiencia de declaración de imputado el juez determinó que deben estar presos.
Ambos estarán recluidos en un centro penal de las periferias de la capital y la audiencia inicial quedó programada para el próximo martes 1 de abril a las 10:30 de la mañana. En el espacio procesal el Ministerio Público afirmó que presentará suficientes medios probatorios para acreditar la responsabilidad penal de ambos hombres.
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Los hechos
El informe de parte de la Policía Nacional establece que esta familia mantenía conflictos desde hace varios años, derivados de la disputa de las tierras que eran de una herencia.
Sin embargo, la situación escaló cuando los ahora acusados llegaron a la casa de las víctimas mortales (madre-hermano) en el caserío El Anís, Curarén, a eso de las 5:00 de la tarde del 25 de marzo del año en curso y comenzaron una discusión que terminó con el saldo fatal.
También, las indagaciones apuntan que los sospechosos, junto a otro hermano-hijo de las víctimas que está prófugo de la justicia, mantenían una enemistad con doña María Alejandra Martínez y Pedro Figueroa Martínez por la herencia,
En el levantamiento de ley, el médico forense determinó que Pedro Figueroa murió a causa de las múltiples heridas por arma blanca. Entre tanto, doña María Alejandra Martínez pereció por asfixia.
Al momento de que los capturaron, les encontraron prendas de vestir con manchas parecidas a la sangre. Estas se enviaron a los laboratorios forenses para su análisis y así agregar evidencias a la judicialización del caso.