Tegucigalpa, Honduras. Más de 7,500 hondureños han sido deportados hasta mediados de febrero, según el último informe del Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (CONMIGHO).
El documento señala que hasta el 16 de febrero suman 7,565 los hondureños deportados por vía aérea y terrestre. En ese orden, las autoridades migratorias de Estados Unidos han deportado hasta el período de referencia 2,817 hondureños, entre ellos 12 menores.
Asimismo, las autoridades aztecas han repatriado a 4,736 hondureños y 833 menores de edad entre ellos, añade el escrito.
De igual manera, desde Centroamérica han regresado al país dos adultos y nueve menores de edad. Un hondureño más ha sido deportado desde Europa, detalla el documento.
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Tendencia en aumento
A falta de los datos de la segunda quincena de febrero la tendencia en las deportaciones de hondureños es a la alza. Eso, ya que en enero se deportó cuatro mil 255 hondureños, 151 connacionales más frente a los cuatro mil 104 deportados en el mismo mes de 2017.
Lo anterior podría obedecer a la política migratoria implementada por el presidente estadounidense Donald Trump. Esto, desde su llegada hace un año a la Casa Blanca.
Este temor, también ha impulsado un constante crecimiento en el envío de remesas familiares. Datos del Banco Central de Honduras (BCH) desvelan un aumento del 17.9 por ciento en el envío de remesas en el primer mes del año 2018.
Según el ente rector de la política monetaria hondureña, en enero el país recibió 357 millones de dólares; un 17.9 por ciento superior a los 302.8 millones de dólares del mismo mes de 2017.
Anualmente la diáspora hondureña, la mayoría radicada en EE.UU. envía en promedio cuatro mil millones de dólares por este concepto.
Tras un año en la Casa Blanca, la administración de Donald Trump, llamada “efecto Trump” por el contrario de mermar el envío de esta divisa ha provocado un aumento no solo a Honduras sino a los países latinoamericanos.
Un reporte del Centro de Diálogo Interamericano reveló que el 2017 se enviaron $75 mil millones desde EE.UU. a América Latina. En ese sentido, un aumento en comparación con el 2016 cuando se enviaron aproximadamente 70 mil millones de dólares.
