TEGUCIGALPA, HONDURAS. La emisión de la nueva tarjeta de identidad recibirá una inyección financiera de 63 millones de dólares, es decir, unos 1,555 millones de lempiras, por parte del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
Así lo confirmó este viernes, Manuel Torres, oficial jefe de país de ese organismo fiananciero centroamericano, quien sostuvo que «estamos conscientes que este es un programa transformacional para Honduras».
Asimismo, indicó que «uno de los elementos que nosotros valoramos para poder financiar un tipo de proyectos es el impacto que este tenga en la sociedad».
Es oportuno recordar que el Registro Nacional de las Personas (RNP) inició con el programa «Identíficate»; con ello, proyecta enrolar a unos 5.5 millones de hondureños a quienes les dará el nuevo Documento Nacional de Identificación (DNI) que sustituirá a la actual tarjeta de identidad. Se prevé que la nueva identidad esté lista para finales de este año.
El representante del BCIE explicó el rol del organismo en este proyecto: «Disponer de recursos financieros para poder ejecutar todo el proceso de enrolamiento, depuración de la base de datos y elaborar la nueva tarjeta de identidad que podrá utilizarse para fines de salud, bancarios, identidad ciudadana y elecciones, entre otros».
Manuel Torres hizo hincapié en que, además del BCIE, la Unión Europea (UE), también está aportando al proyecto con 14 millones de dólares; mientras que, el Gobierno de Honduras asumirá la contraparte del costo.
«Ya hemos desembolsado unos 11 millones de dólares y estamos muy pronto a desembolsar otra parte para la segunda fase del proyecto», detalló Torres.
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Proyecto híbrido
A criterio del representante del BCIE, el proyecto de la nueva identificación, es un «híbrido». Puesto que es dirigido por el RNP y existe dentro de su mecanismo de gobernanza una junta de proyectos representada por la Secretaría de Finanzas, Cancillería, BCIE y PNUD.
A renglón seguido expuso que los hondureños deben aprovechar los ingredientes necesarios para lograr la confianza en el ejercicio democrático.
«Este es un buen momento de hacerlo y enrolarse es fundamental; pues se está haciendo respetando los protocolos de bioseguridad», continuó diciendo.
Sumado a ello, el entrevistado explicó que el BCIE hizo una valoración del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en el proceso de acompañamiento.
Como resultado de ello, concluyeron que existen dos dimensiones: «por un lado, el rol de asistencia técnica a través de expertos de primer nivel y en segundo lugar, la parte fiduciaria, es decir el PNUD administra los recursos del contrato de préstamo», aseguró.
«Esta operación no es muy usual en el banco. Pero estábamos conscientes que debíamos apoyarnos en una institución como el PNUD que ha acompañado técnicamente al gobierno en todo este proceso. Además, valoramos su experiencia e imparcialidad, entre otros aspectos», agregó.
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