Redacción. Autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP) anunciaron este día que no permitirán durante 60 días que los privados de libertad que se encuentran en la granja penal de máxima seguridad «El Pozo», ubicada en el municipio de Ilama, Santa Bárbara, reciban visitas.
El coronel Ramiro Muñoz, director del INP, explicó que tomaron la medida debido a que algunos reos han utilizado niños y mujeres para ingresar drogas y armas dentro de los módulos.
«Esto es claro, hay una organización criminal. Por ejemplo, en Ilama, ¿cómo se pone a creer?, cuatro mujeres (intentaron ingresar sustancias prohibidas). Esto todos lo saben y para todo se organizan. Les dije y les mencioné antes (a los reos): señores, disfruten de sus hijos. No vayan a intentar ingresar aparatos electrónicos o cualquier tipo de ilícito», explicó el coronel Muñoz.
Luego, tras la negativa de los reclusos, decretó que a partir de hoy se cancelan los encuentros familiares. Además, informó que replicarán las acciones en prisiones donde detecten ilícitos. En especial, cuando exponen a menores de edad y féminas como objeto participativo.
«Nosotros sólo cuidamos dos cosas: las mujeres y los niños. Yo estoy seguro que ninguna mujer voluntariamente va a introducir en su cuerpo cosas ilegales, sólo para favorecer (a presos), peor droga», exteriorizó molesto Muñoz.
Posteriormente, reiteró que «ojalá fuera comida» lo que ingresan, pero que lamentablemente son sustancias estupefacientes no permitidas por la justicia.
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Capturan a tres mujeres por intentar ingresar droga
Preliminarmente, tres mujeres fueron detenidas por intentar ingresar drogas a «El Pozo», informaron medios locales y autoridades policiales.
Elementos de la Dirección Policial de investigaciones (DPI) y Dirección Nacional de Prevención y Seguridad Comunitaria (DNPSC) capturaron a las sospechosas, de 21, 22 y 34 años de edad, durante una revisión de rutina.
A las féminas les hallaron y decomisaron envoltorios que contenían marihuana y cocaína (1 libra), así como varios teléfonos celulares. Autoridades las movilizaron a un centro policial y se les acusará del delito de tráfico de droga agravado en perjuicio de la salud pública del Estado de Honduras.