Redacción. El planeta enano Eris, descubierto en 2005 por el astrónomo Michael E. Brown y su equipo de investigación, sigue siendo un objeto de fascinación para la comunidad científica.
Aunque el descubrimiento de Eris fue un avance significativo, sigue siendo prácticamente invisible para los telescopios modernos debido a su enorme distancia y tamaño relativo.
Este factor ha llevado a los astrónomos a estudiar la composición del planeta enano en relación con su luna Disnomia, lo que ha representado un reto constante en su investigación.
Impacto en la definición de planeta
El hallazgo de Eris, junto con el debate generado sobre su estatus como planeta, fue crucial en el cambio de perspectiva sobre la definición de «planeta» en la Unión Astronómica Internacional (UAI).
En mayo de 2024, el equipo de Michael E. Brown trasladó una cámara de 3.200 megapíxeles desde el Instituto Tecnológico de California a la cima del Cerro Pachón en Chile.
Este esfuerzo tiene como objetivo capturar imágenes más detalladas de Eris y otros objetos en esa distante región del sistema solar.
Puedes leer: La NASA se prepara para «tocar el sol» esta Navidad
A partir de este trabajo, los astrónomos buscan expandir los límites de nuestro conocimiento sobre los planetas y cuerpos celestes más allá de Neptuno.
Para ello, el Observatorio Vera C. Rubin, que abrirá en 2025, jugará un papel fundamental al incorporar telescopios capaces de registrar millones de fenómenos celestes, como asteroides, estrellas colapsadas y nuevos planetas.
Brown sostiene que, con el hallazgo de Eris y la capacidad de reflejar la luz necesaria para rastrear su ubicación, será posible determinar con mayor precisión la existencia de otros cuerpos celestes y su relación con el Sistema Solar.