TEGUCIGALPA, HONDURAS. Entre 15 y 20 asaltos ocurren diariamente a unidades de transporte que prestan su servicio en la capital, según datos de la Asociación de Taxistas de Honduras (Ataxish).
De esa cifra, cinco (25 por ciento) se registran en taxis. El flagelo, estima la asociación, está presente desde hace una docena de años.
Víctor Aguilar, presidente de Ataxish, describió cuáles son las características de la operaciones dirigidas por bandas delictivas. La población deberá tomar las precauciones debidas para evitar ser víctima de los ataques a este rubro.
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Calcomanías: Números Ilusorios
Uno de los mecanismos de acción que atentan contra usuarios de transporte es el del secuestro exprés. ¿En qué consiste? Vehículos blancos aparentan ser un taxi común… pero su «carrera» es hacia un lugar previamente planeado y con un fin determinado.
«Usan carros particulares color blanco para asaltar; los números que portan son calcomanías (stickers) y andan polarizados», explicó Aguilar.
Seguido, las víctimas son despojadas de sus pertenencias. El desenlace es incierto. Quizá, sólo les dejen abandonados, pero un daño físico o un fatídico registro también son posibilidades.
¿En dónde suelen perpetrarse estos asaltos? Se dilucidó que es en los sitios más solitarios de los principales bulevares, el anillo periférico y en calles poco iluminadas y concurridas de barrios y colonias de la capital.
Incremento desmedido de incidentes
Otro dirigente, quien no aportó su nombre, describió las consecuencias de la problemática en los motoristas y sus familias.
«La delincuencia ha crecido de una forma incontrolable. En los últimos años unos 20 puntos de taxis colectivos han cerrado en la capital; nuestros usuarios y conductores son víctimas de asaltos todos los días«, desveló.
Y añadió, sobre los efectos en la parte directriz: «Nosotros también somos víctimas pero las denuncias no se hacen porque estamos expuestos. Ya tenemos más de 12 años de estar sufriendo de forma crítica».
Es importante conocer que la información provista indica que hay alrededor de 73 rutas de buses; en las mismas, circulan más de mil 500 unidades («rapiditos» y los amarillos). En cuanto a taxis, hay siete mil 300 inscritos. Habría también otros tres mil 500 ilegales.
Cabe destacar que hace un lustro (cinco años) habían 120 puntos de taxi en vigencia, ahora, se redujo a 101 por la inseguridad.
