La violencia contra transportistas se extendió hasta la zona occidental de Honduras, luego de que este miércoles se registrara el asesinato del conductor de un autobús en Erandique, Lempira, confirmó la Policía Nacional del lugar.
Con apenas 21 años de edad, Josué Reyes tenía una vida por delante. Para ayudar a su familiar y costearse sus necesidades trabajaba en las unidades del barrio Guaimaca.
Según la versión preliminar del crimen, este miércoles salió de su casa como usualmente ocurría. A primeras horas de la mañana, sujetos desconocidos y armados lo estaban esperando. Cuando vieron que se dirigía a la estación de buses, le dispararon.
El veinteañero cayó inmediatamente y ante la falta de asistencia médica, perdió la vida en ese mismo sitio. Hasta el momento se desconocen los motivos del crimen o el paradero de los responsables pero ya iniciaron las investigaciones.
La Policía Nacional de la zona vincula el hecho con el cobro de extorsión. Sin embargo, el personal investigativo confirmará o desmentirá la primera hipótesis.
Sus compañeros de trabajo y allegados pidieron a las autoridades encontrar a los hechores y que no quede en la impunidad. Por su parte, pobladores del barrio mencionado reaccionaron consternados porque se trata de un lugar tranquilo.
Ellos explican que en Guaimaca no se registran ese tipo de hechos sangrientos ni otros casos que irrumpan la paz de los residentes.
Asesinan a un taxista en Comayagüela
El pasado 8 de agosto, sicarios a bordo de una camioneta ultimaron de varios disparos a un conductor de taxis en la colonia La Rosa, en Comayagüela, capital de Honduras.
A la víctima se le identificó como René Espinal Izaguirre, quien conducía el taxi número 5767. Según reporte, iba a bordo de la unidad cuando los desconocidos lo interceptaron. Lo que sucedió a la altura del Instituto Técnico Saúl Zelaya Jiménez, donde le quitaron la vida.
