SANTA BÁRBARA. Desde primeras horas del tercer día de 2017 se empezó el traslado de al menos una docena de reos hacia la prisión»El Pozo #1″, en la zona occidente del país.
«El Pozo» es una cárcel de máxima seguridad ubicada en el sector de Ilama, Santa Bárbara.
Desde las 6 de la mañana de hoy, 3 de enero de 2017, se transfirió a cabecillas de la Mara 18 con alto grado de peligrosidad. Esto de acuerdo a la versión del Gobierno y la Polic ía Nacional.
Los reclusos llegaron a la cárcel desde varios centros penitenciarios del país, entre ellos: San Pedro Sula, Támara, Danlí, Choluteca, El Porvenir y Juticalpa.
Los nombres de los reos y cabecillas de la Mara 18 son:
San Pedro Sula: Rodolfo Banegas, Javier Aguilar, Alejandro Chávez y Julio César Ponce.
Támara: Edwin Maldonado, Henry García y Wilfredo Martínez.
Danlí: Wilmer Fonseca.
Choluteca: Edwin Euceda y Alex Pineda.
El Porvenir: Nelson Castro, Clemente Meza, Guillermo Banegas y Jony Martínez.
Juticalpa: se desconoce el nombre.
REOS SE QUEJAN
Los reclusos fueron transportados hasta «El Pozo» vía aérea.
Sin embargo, al momento de llegar a la cárcel uno de ellos empezó a quejarse con las autoridades.
“¿Por qué solo nos trasladan a nosotros? ¿Cuál es el pedo de no agarrar a los MS (Mara Salvatrucha)?”, dijo un reo.
Además, ellos aseguran que hay persecución para los miembros de la Mara 18 y dejan libres a los MS.
MEDIDAS TOMADAS POR PELIGROSIDAD
Hasta el momento, había 63 personas en las celdas de “El Pozo” y se espera llegar a los 80 con los transferidos de este día.
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Además, según declaraciones del Abogado Luis Suazo, para mover a un preso de una penitenciaría se valora la peligrosidad.
Hay un equipo completo que evalúa la actividad delictiva desde los centros penales y su grado de peligrosidad, en base a eso son transferidos.
Todos los transferidos todavía se dedicaban a la extorsión y ordenaban masacres, asesinatos y secuestros desde los centros penitenciarios, aseguró el lunes el presidente Juan Orlando Hernández.
LLEGADA HASTA «EL POZO»
Los reclusos llegaron al lugar y todos fueron rapados, y vestidos con su traje naranja.
Finalmente, se sabe que todos ellos solo tendrán derecho a una hora diaria de sol y deberán conformarse con la comida ofrecida ahí.
Asimismo, se supone que todas las comodidades en la vida de los cabecillas sean cosa del pasado.