El fin de semana ha hecho que los ánimos hayan cambiado mucho en Barcelona. Si bien entre semana goleaban con una exhibición al Sevilla.
El sábado perdieron 2-0 en Málaga y no aprovecharon el empate del Real Madrid en el derbi, por lo que los blancos aumentaron su ventaja a tres puntos. Pues bien, uno de los más enfados con el resultado fue Leo Messi, que echa la culpa a tres compañeros suyos.
El argentino es uno de los capitanes del club y manda mucho tanto en el campo como fuera de él. Por eso, el rosarino ha pedido la cabeza de André Gomes, Denis Suárez y Jérémy Mathieu.
Los tres fueron titulares en Málaga y la verdad es que ninguno dio la talla. El luso vino como gran fichaje, pero está siendo muy cuestionado por su bajo rendimiento. E incluso se duda mucho su continuidad en el equipo.
El joven español ha contado con pocos minutos este año y la mayoría han llegado desde el banquillo. Su vuelta a Barcelona prometía mucho, pero se ha quedado en promesa.
Por último
Mathieu es el cuarto central del Barcelona y si Luis Enrique puede evitar usarle, mejor. El problema es que Piqué era baja y el técnico hizo algunos cambios que le obligaron a que el francés jugase.