TEGUCIGALPA.- La estatua de San Juan Bosco ubicada en el bulevar La Hacienda de la capital del país fue manchada con pintura roja como protesta.
Las manchas podrían interpretarse como protesta por los abusos que cometen algunos sacerdotes en contra de menores de edad.
Abusos que han sido registrados ampliamente alrededor del mundo.
En la estatua aparece San Juan Bosco junto a dos niños, ambos sosteniendo libros en sus manos.
La estatua es originalmente de color blanco en su totalidad.
Pero hoy la estatua apareció con grandes manchas rojas que cambian completamente su sentido.
El santo tiene una gran mancha roja que le cubre toda la parte genital y baja hasta sus piernas.
Mientras que por la parte de atrás, se observan manchas rojas en los traseros de los niños.
La espalda del santo también fue marcada con una cruz roja invertida.
Las señas son claros símbolos del abuso infantil que han sufrido muchos menores por parte de sacerdotes.
Hasta el momento, las autoridades no se han pronunciado al respecto y se desconoce el o los responsables de la modificación.
Tampoco se ha emitido algún comunicado por parte de los hechores dando una explicación oficial.
Sacerdote confiesa que él y otros abusaban de niños sordos
Los primeros días del presente mes se informó sobre la captura de una monja japonesa por entregar niños sordos a curas violadores; dicha versión fue confirmada por uno de ellos.
“Abusábamos de niños sordos, eramos al menos diez”, dijo el sacerdote Piccoli. Quien además brindó su declaración de que el abuso era tan adictivo como fumar.
El sitio italiano Fanpage.it difundió un vídeo en el cual visitan a uno de los sacerdotes hospedado en un hotel del Vaticano. Una de estas personas se hizo pasar por un exalumno y fue así como Piccoli confesó y enredó a otros colegas.
Asimismo, Eligio Piccoli siempre trató de desviar la idea de “pecado” de las acciones que realizaba. En ningún momento aceptó sus actividades secretas como un error, al contrario, se reía de recordar lo que hacía.
