Mauricio Oliva a la oposición: «El que se corre pierde 7 a 0»

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Mauricio Oliva.

TEGUCIGALPA.- Ante las amenazas de la oposición de no participar en las próximas elecciones argumentando que no cuentan con las condiciones necesarias para participar en los comicios a falta de reformas electorales, el presidente del Congreso Nacional (CN), Mauricio Oliva les dice que “el que se corre pierde 7 por 0”.

Y sobre la reelección presidencial, Oliva afirmó que así “como está la legislación hondureña actual, cualquier hondureño, independientemente de su condición, se puede postular para cualquier cargo de elección popular y la Presidencia de la República no es la excepción”.

Los líderes del Partido Liberal de Honduras, Partido Anticorrupción y Libertad y Refundación han señalado que pueden boicotear las elecciones generales del próximo año si no se aprueban reformas electorales que permitan la segunda vuelta y el voto electrónico, entre otras demandas.

PRESENTAN CANDIDATA DE LIBRE

La candidata presidencial del Partido Libertad y Refundación (Libre), Xiomara Castro de Zelaya, aseguró que sin reformas electorales no van a haber elecciones, amparados en la Constitución de la República que “llama a la insurrección”.

“Si no hay reformas electorales, en este país no van a haber elecciones. Nos sustentamos en un artículo de la Constitución que llama a la insurrección, si violentan sus derechos”,expresó Castro.

Reiteró “no hay elecciones, el pueblo se va para las calles para exigir que queremos elecciones transparentes, queremos que sea el pueblo que decida quién será su próximo presidente”.

Cabe destacar que los integrantes del partido de oposición Rasel Tomé y Esdras Amado López, entre otros, no se hicieron presentes en la marcha convocada por las máximas autoridades de Libre.

Consultada si al no haber elecciones generales quién va ostentar la titularidad del Poder Ejecutivo, manifestó que “tenga la plena seguridad que no va a ser JOH (Juan Orlando Hernández)”.

La marcha se concentró este sábado en horas de la mañana frente a las desoladas instalaciones del Tribunal Supremo Electoral (TSE).