SAN PEDRO SULA, HONDURAS. ¡Conmoción e indignación!, es lo que deja en los ciudadanos el asesinato de un niño de 11 años en El Progreso, Yoro. Una familia enlutada que inició su agonía una semana atrás cuando él desapareció y ahora están en la Morgue de San Pedro Sula, rogando porque los autoridades se apiaden de ellos.
Su madre, en llanto y adolorida, ha exigido que hagan justicia para su pequeño hijo, Marvin Isaac Portillo, un niño inocente que junto a ella se dedicaban a hacer shows vestidos como payasitos para ganarse la vida.
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Los hallazgos en el caso
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Marvin y su madre no están inscritos
En medio del dolor, lágrimas y consternación sus familiares aún no puedan darle cristiana sepultura. Él y su madre, Josselin Johana Portillo, no están inscritos en el Registro Nacional de las Personas (RNP) y por ello, en la morgue no pueden entregar el cuerpo del menor.
Su madre, desconsolada por todo lo que ha vivido, rogaba a las autoridades que le entregaran el cuerpo de su único hijo para hacer un velorio.
“Por favor que me den a mi Isaac. Él no tenia papeles y yo no tengo culpa, no me lo dan porque no tengo dinero, no tengo culpa de ser pobre, lo que quiero es a mi hijo, lo quiero enterrar”, clamó entre llanto.
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Sospechas de violación
Ayer por la tarde se conoció de la captura de dos hombres, acusados de asesinar al menor. Inicialmente se conoció que al pequeño Isaac le quitaron la vida con arma blanca, un machete. Pero encontraron su cuerpo con los pantalones abajo, algo que despierta sospechas de que fue violado.
Este extremo no se ha confirmado. Las autoridades policiales revelaron que harían pruebas forenses para determinarlo y brindar el informe.
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Orden de captura
Seguido de la captura de los dos hombres, las autoridades revelaron que encontraron y decomisaron un arma blanca tipo machete. Ellos también tenían rastros de sangre, que también serán analizados para confirmar si pertenece al menor.
Es importante recalcar que no los requirieron como sospechosos, sino mediante una orden de captura. Según indicó el subcomisionado de la Policía Nacional, Adolfo Ordóñez, cuando hay una orden de captura es porque se cuenta con indicios suficientes para determinar la culpabilidad de la persona.
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Hipótesis del crimen
No existe una excusa válida para quitarle la vida a una persona. Sin embargo, el padrastro del menor fallecido mencionó que manejaban una hipótesis.
Comentó que Marvin Isaac estaba en una cancha de fútbol y al ver una bicicleta, se habría confundido y la tomó. Ese habría sido el detonante de los hechores, según la versión de sus familiares.
El niño estaría cumpliendo sus 12 años el 25 de octubre. Justamente a su madre le pedía una fiesta de cumpleaños y como regalo, una bicicleta, su sueño más anhelado.
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«Payasito»
Su madre relató que para ganarse la vida se vestían como “payasitos”, subían a unidades de buses, hacían sus shows para hacer reír a los presentes y obtener unos lempiras. El pequeño Isaac nunca lo cuestionó.
En su última plática, el niño le dijo que lo que había ganado en “las maquinitas”, le daría 100 lempiras. La vida del niño “payasito” de El Progreso, no fue sencilla, pues desde los cuatro años tenía un problema en uno de sus pies. Para él habría sido imposible huir.
Pese a ello, nunca hubo obstáculos para él. Ayudaba a su madre con los ingresos, pintándose la cara, poniéndose su vestimenta de “payasito” y saliendo a ganarse la vida.
A su corta edad, vivió tiempos difíciles, trabajó cada día sin cuestionar y ahora, su familia, lo único que pide es justicia. Así como su cadáver para darle una cristiana sepultura y que un niño inocente por fin descanse en paz.
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