REDACCIÓN. Un extraño hecho se dio en las últimas horas en la capital hondureña, cuando muchas personas daban por muerta a la joven de apellidos Alvarado Tovar, exactamente en la red social Facebook.
Muchos de lo seguidores que la muchacha tiene en redes sociales, comentaron en reiteradas ocasiones sus muestras de pesar, ante el supuesto asesinato de la jovencita, cosa que al final nunca ocurrió.
Aparentemente, la joven había desaparecido por unos días y sus amigos, pensaron que la violencia les había arrebatado a su ser querido; sin embargo, en las últimas horas, un nuevo mensaje en Facebook redactado con el nombre «J. N Alvarado Tovar», levantó la controversia en muchos, puesto que la daban por muerta:
«Bueno jente hermosa no se kien fue el k saco eso k me avian matado bueno les quiero decir k estoy viva gracias a Dios y mas gracias x esa jente k se preocupo x mi les digo de corazon no imbenten cosas k no son xfa gracias att: N. tovar», decía el mensaje íntegro de la joven en las redes sociales.
Al mirar el nuevo post de la joven, sobraron las reacciones de quienes pensaban había fallecido, pero esta vez, emocionados al saber que en realidad estaba viva, de igual manera, la joven agradeció a todos por el cariño mostrado durante su ausencia.
Caso para nunca olvidar en redes sociales
A lo que una de sus amigas respondió y lo compartimos de forma íntegra: «Mi Perra me alegro que todo sólo fue un rumor tkm mi pollito ya sabes que se te kiere un pijo y siempre estas firme y Dios te guarda siempre mi perrita Dios sabe lo linda que eres por dentro y por fuera y el te acompaña siempre mi Perra Ana te adora esa loka esta bn mal pero gracias a dios sólo fue un mal entendido».
Anteriormente, uno de sus más cercanos amigos había posteado el siguiente mensaje de manera íntegra: «Te voy a extranar manita no se xk paso todo esto ni se xk tu mi perrita te adoro nunka te voy a olvidar Mi perrita nunka olvidare los momentos k pasamos juntos tu y yo siempre te recordaremos mis familya y yo te amo siempre te yevare clavada en mi mente. Y mi corazón».
