TEGUCIGALPA, HONDURAS. Un total de 250 mil kits de pruebas para el diagnóstico de COVID-19 se arruinaron y permanecen embodegados en Honduras, según se dio a conocer la noche del domingo.
La doctora Karla Pavón, jefa de Vigilancia y Virología de Salud lo admitió en primera instancia; se refirió a 100 mil pruebas PCR. Horas más tarde la Inversión Estratégica de Honduras (INVEST-H), comprador del cargamento, se pronunció y aclaró que eran más.
Además, la unidad de gestión brindó una breve cronología de la adquisición; en ese sentido, se desmarcó de responsabilidad, aduciendo que hubo un mal manejo por parte de la empresa de transporte.
Por tanto, las autoridades de INVEST-H estarían preparando un procedimiento legal en búsqueda de un reemplazo de la mercancía dañada.
Antecedente – Karla Pavón: “100 mil pruebas PCR se arruinaron” por mal manejo de temperatura
Gestión inicial
De manera inicial, INVEST-H recordó en el escrito provisto que la Secretaría de Salud, a través de su departamento de Redes Integradas de Servicios, solicitó a la Secretaría de Finanzas la adquisición de los kits de análisis.
Ante ello, se encomendó a la unidad de gestión -en ese entonces dirigida por el abogado Marco Bográn– que comprase el material requerido. Entonces, se efectuó la gestión para conseguir los 250 mil kits «Accupower RT-PCR«.
Es oportuno precisar que, según se conoció, el equipamiento se solicitó a una compañía de Corea del Sur.
Desde el 21 de abril INVEST-H recepcionó la primera porción del lote. 100 mil pruebas fueron entregadas a los técnicos de la Secretaría de Salud. Según el comunicado, el proceso contó con la supervisión de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) y el Tribunal Superior de Cuentas (TSC).
Problemas de temperatura
Seguido, se explica que, al momento de la recepción, los organismos de veeduría y los técnicos encargados identificaron que las pruebasvenían a la temperatura correspondiente y establecida. Por lo que las mismas «quedaron sujetas a una evaluación» para verificar que su efectividad no hubiese sido dañadas.
No obstante, tal como anunció Karla Pavón, constataron que simplemente no contaban con las condiciones adecuadas.
Sobre las 150 mil pruebas restantes, INVEST-H no precisó cuándo llegaron al país. Sin embargo, relató que, mientras se producía el desaduanaje, las mismas permanecieron en un cuarto frío de entre 2° y 8° celsius.
Eso representó una sustancial variación en torno a la temperatura propicia; cabe apuntar que ese es un detalle que supuestamente se acordó en la compra y no se cumplió. Se desconoce si el aspecto se planteó por escrito.
Proceso legal
La situación de incumplimiento en la cadena de frío provocó, según lo plasmado, en que INVEST-H no diera «por recibidas» esas pruebas. Es más, aseguran que todavía están guardadas en el almacén de la empresa de transporte, cuyo nombre no fue provisto.
Además, se externó que ya se iniciaron los trámites legales para que la empresa de transporte asuma su responsabilidad y sustituya el material diagnóstico.
José Leva, jefe de la Junta Interventora de INVEST-H, ratificó el panorama este lunes; manifestó que ya hicieron el reclamo al comercio en mención.
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