La selección nacional de Honduras se despidió dignamente del mundial juvenil de Corea de Sur al derrotar 2-0 a Vietnam.
El equipo catracho tenia escasas posibilidades de clasificación, puesto que debía ubicarse como uno de los mejores cuatro terceros de la fase de grupos.
Los goles catrachos fueron obra de Sendel Cruz y de Jorge Álvarez, quien marcó dos goles en el mundial.
El equipo catracho sumó tres puntos, librándose de este modo de las últimas posiciones.
PREVIA: La selección Sub-20 de Honduras necesita poco menos que un milagro el domingo en Jeonju ante Vietnam. Solo si quiere clasificarse a los octavos de final del Mundial de Corea del Sur.
Última de la llave E con su casillero de puntos a cero, la bicolor no podrá en ningún caso superar el tercer puesto, pero su diferencia actual de -5 goles. Obliga a una goleada escandalosa ante la debutante selección asiática si quiere tener opciones de acceder a octavos. Esto como una de las cuatro mejores terceras.
Francia, con seis unidades, y Nueva Zelanda, con cuatro, están lejos del alcance del combinado centroamericano.
Las derrotas ante el campeón de Europa (3-0) y el de Oceanía (3-1) han dejado muy herido al conjunto ‘catracho’. Tiene todos los boletos para despedirse del torneo en primera ronda, al igual que en las seis anteriores citas mundialistas que ha disputado.
Sin embargo, los pupilos de Carlos Tábora confían en lograr un triunfo ante los vietnamitas. Así que les permita abandonar el país asiático con buen sabor de boca.
– Apoyo popular a Vietnam –
Pero el rival de Hondura, que le supera en la tabla merced al empate conseguido ante Nueva Zelanda en la fecha inaugural, cuenta con la baza del apoyo del público surcoreano, que por cercanía y por su carácter semiamateur se ha volcado en torno a la selección de Vietnam.
Honduras ya lo comprobó de primera mano cuando a principios de la semana observó el contraste de las gradas en su partido ante Francia, y el colorido que presentaban las mismas tribunas horas después en el choque de Vietnam ante Nueva Zelanda.
“En las gradas hay muchos jóvenes vietnamitas que estudian aquí en Corea del Sur”, explica Phan Dang, un periodista vietnamita.
Aunque exiguas, el conjunto del sudeste asiático conserva alguna opción de colarse en octavos de final. Pero al igual que Honduras, su 4-0 en contra ante Francia le obliga a golear a su rival del domingo.
La delegación vietnamita está viviendo como una fiesta su estreno un Mundial, y llegó incluso a celebrar hasta altas horas de la madrugada su empate ante Nueva Zelanda.
Honduras deberá contrarrestar ese entusiasmo ofreciendo una imagen muy diferente a la mostrada en sus dos primeros choques. La hoja de ruta de los hombres de Carlos Tábora pasa por ganar, golear, y confiar en que el los resultados del resto de los grupos obren el milagro. AFP
