TEGUCIGALPA.- Un total de 430 extorsionadores han sido condenados y enviados a prisión, según informe que presenta la Fuerza Nacional Anti extorsión (FUSINA).
La mayor incidencia del crimen de la extorsión en el país se da en las ciudades de Tegucigalpa, San Pedro Sula, El Progreso y La Ceiba; en el resto de los departamentos son casos aislados según revela el informe.
Además, durante los últimos tres años se registra un total de dos mil personas capturadas también por el delito de extorsión, quienes forman parte de bandas que hoy han sido desarticuladas mediante operativos y capturas que se realizan a diario.
El Director de la Fuerza Nacional Antiextorsión (FUSINA), Amilcar Hernández Hernández señala: «no tenemos números exactos de cuantas personas se dedican a este delito pero sí tenemos proyecciones en base a las denuncias que recibimos.», dijo.
«Hace unos años hemos peleado con un serio grupo porque la misma extorsión había causado una proliferación de bandas para cobrar más rentas actualmente en el sector transporte, y por eso estamos haciendo las acciones de oficio”, agregó.
Según investigaciones, en el país cada seis horas se registra un nuevo caso de extorsión y son hasta dos personas las que a diario se les detiene por este delito y, en resumen, en los últimos cinco años y medio se han detectado más de 4,271 casos.
Pero esos son solo los denunciados, pues hay innumerables extorsiones más que se quedan en la clandestinidad por temor de las víctimas de dar a conocer su caso.
Por lo tanto, el delito de extorsión hoy es señalado como el flagelo que tiene de rodillas al país, incluyendo a micro y grandes empresarios que de manera semanal deben reunir una cuota determinada por el extorsionador porque, de no ser así, podría sumarse a las cifras rojas de la violencia en Honduras.
