Tegucigalpa. La extorsión en Honduras es uno de los flagelos que más ha dañado y torturado a los hondureños en los últimos años, causando incontables muertes y multimillonarias pérdidas económicas en el país.
Diferentes sectores han sido perjudicados. Y a pesar del fuerte combate contra esta forma delictiva, las acciones de estas redes criminales continúan manteniéndose como uno de los más grandes males en Honduras.
A criterio del sociólogo Julio Navarro, el sector más afectado con este delito, es el pequeño y mediano comerciante.
“Pequeños y medianos comerciantes, llámese a estos dueños de pulperías, mercaditos y dueños de transporte público”, agregó.
De igual manera, este fenómeno ha tocado las puertas de las viviendas de muchos ciudadanos. Problemática que no se había vivido en el país.
“Cuando ya las pulperías y supermercados se agotaron, hay lugares donde están pidiendo extorsión por viviendas”, expuso Navarro.
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La familia es la primera institución que se quebró ante este flagelo
El experto en temas sociales, explicó que las maras o pandillas en el país, tiene gran culpa en la creación del delito de la extorsión. Una de las principales causas por la que se de este delito, es la desintegración familiar.
Navarro, especificó que “la primera institución que se quiebra en Honduras, es la familia. Esta, deja de ejercer control sobre los hijos. Y en algunos momentos por las familias donde falta el padre o falta la jerarquía”.
Reconoció que tampoco habría que desestimar la crisis económica y social que vive el país. Y que ese factor, orilla en muchas ocasiones a miembros de las familias a cometer esos hechos ilícitos.
En ese sentido, Navarro también encierra las otras dos instituciones que poco a poco la extorsión les ganó el camino, son la policía y la iglesia.
“Al deteriorarse estas instituciones, perdieron la capacidad de ejercer control sobre estos grupos incipientes. Y comenzaron a desarrollarse ahí por el año 2004”, manifestó el sociólogo.
No se ha evitado la extorsión en Honduras
A juicio de Navarro, el delito de extorsión en el país no se ha enfrentado de manera correcta. Dado, a que solo se ha enfocado en reprimir el delito y se ha dejado de lado la investigación.
“La mayoría de las acciones no van orientadas a cómo evitamos que cuantos jóvenes puedan entrar a realizar este tipo de actividades ilícitas. Pero no, están orientadas a cómo combatir de manera efectiva este delito”, acotó.
Uno de los factores que más ha llamado la atención en los últimos días, ha sido la captura de muchos profesionales involucrados a este delito. Esto, según Navarro se debe en su mayoría, a las amenazas que reciben estos.
“Este factor, se debe a las amenazas que reciben los jóvenes en las colonias y barrios vulnerables. Obligándolos, ya sea como mandaderos para practicar extorsión, eso mismo parece ser que se ha dado en el transporte”.
Todo esto, se presta a pensar que los extorsionadores lo hacen por voluntad propia. Y en muchos casos a estos los obligan, ya sea por amenazas a la sus vidas o sus familias.
Navarro, finalizó expresando que la extorsión es un fenómeno sumamente complejo. Porque no está ligeramente ligado a grupos organizados delincuencialmente.
La extorsión en cifras
Desde 2013 hasta el primer trimestre de 2017, la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA), ha dado captura a un total de 2656 supuestos extorsionadores.
Desglosando esa cifra, solo este año, la FNA ha presentado a 182 hombres mayores de edad, vinculados a este delito. De igual manera, 16 mujeres adultas.
En el caso de la participación de jóvenes menores de edad, los cuerpos de investigación le han dado captura a 37 varones menores de edad y 10 féminas menores de 18 años.
Cabe resaltar, que semanas atrás, el Congreso Nacional aprobó las reformas al Código Penal. Con el objetivo de modificar y endurecer las penas para quienes cometan este delito.
Hasta la fecha y después de las reformas, los juzgados nacionales han realizado sus primeras condenas. Para el caso al señor Marco Tulio Rodríguez Recinos, se le condenó a 15 años de prisión por hallarle culpable del delito de extorsión.
