TEGUCIGALPA. El exagente de la extinta Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC), Carlos Fernando Oliva Flores, fue condenado a 134 años de prisión por el asesinato de seis personas en La Ceiba.
El exoficial fue sentenciado por darle muerte a Marlon Samir Sevilla Ramírez, Elmer Gualberto Peraza y Gerson Argenis Norales Lino. Asimismo, fue condenado por los homicidios de Osman Geovanny Sánchez Colindres, José Luis Tábora Canales y Adán Josué Perla.
Los hechos tuvieron lugar en un establecimiento comercial ubicado en la colonia Pizzati de la ciudad de La Ceiba; departamento de Atlántida. De acuerdo a datos oficiales, la masacre se registró en el mes de marzo del año 2012.
El Tribunal de Sentencia le impuso a Oliva Flores una pena de 22 años de reclusión por cada uno de los asesinatos. Por consiguiente, el imputado deberá cumplir una condena de 134 años en total; considerando que también fue sentenciado a 2 años por el delito de atentado.
Por lo tanto, el condenado será trasladado al centro de reclusión que determine el Instituto Nacional Penitenciario.
Cabe resaltar que el Ministerio Público también acusó a otros dos oficiales en el transcurso del caso. Carlos Omar Maldonado Cardona y Roberto Fernando Méndez Rodríguez fueron procesados como sospechosos.
No obstante, después de valorar los medios de prueba, el tribunal determinó absolverlos. De acuerdo al expediente, no se comprobó la participación de ellos en los delitos antes mencionados.
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El recuento de los hechos
Según las investigaciones, los hechos ocurrieron el pasado 18 de marzo del 2012 a eso de la 7:30 de la noche. El policía Oliva Flores, asignado como agente de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) en La Ceiba, se transportó en compañía de otras personas hacia los billares Mayita en la colonia Pizzati.
Seguidamente, el condenado entró al establecimiento portando armas de fuego y un chaleco de la Policía Nacional. Una vez en el lugar, el exagente empezó a disparar en contra de la humanidad de todos los presentes.
Luego de darle muerte a las seis víctimas, Oliva Flores abandonó el lugar junto a las personas que lo acompañaban. Sin embargo, a una cuadra de la escena del crimen fueron interceptados por una patrulla policial que fue alertada de lo sucedido.
Esto suscitó un enfrentamiento entre ambas partes, donde se logró identificar a uno de ellos como agente de la DNIC.
