Costa Rica: De jefe de la Policía a paramilitar narco

José Fabio Pizarro fue nombrado director de la Fuerza Pública con una gran trayectoria bajo el brazo, pero terminó creando un grupo armado y fue detenido con 237 kilos de cocaína.

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ex jefe policial de Costa Rica

La penetración del narcotráfico en sectores como el de la pesca y el agrícola, ha sido evidente en los últimos años, pero la detención de José Fabio Pizarro, un ex jefe policial de Costa Rica, sospechoso de liderar un grupo paramilitar narcotraficante ha conmovido al país.

Costa Rica, un país reconocido mundialmente por su pacifismo, no tiene Ejército desde 1948. Mucho menos guerrillas o grupos paramilitares, o al menos eso se creía.

Pizarro, quien fue director en 2007 de la policía de Costa Rica llamada Fuerza Pública, ejerció ese cargo gracias a su gran preparación y trayectoria policial.

Mismos conocimientos que años después pondría al servicio de carteles narcotraficantes de Colombia y México. Eso, según investigaron las autoridades de ese país.

Pocos en Costa Rica se tomaron en serio a Pizarro cuando, ya fuera de cargos policiales, en 2013 anunció la creación de la «Patrulla 1856». Este era un grupo armado paramilitar que decía tener como misión defender la soberanía del país ante una invasión de Nicaragua en momentos en que se recrudecía un litigio limítrofe.

El grupo publicaba en redes sociales sus entrenamientos y los medios de comunicación locales consignaron sus actividades. De pronto desapareció del mapa público sin haber hecho movimientos de ataque o cometido delitos.

Además,sin saberse a ciencia cierta cuántas personas fueron entrenadas.

La Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS) informó recientemente que investigaba al grupo armado desde su formación.

Pizarro, en su función policial.
Pizarro, en su función policial.

Narcotráfico en Centroamérica

Pizarro, de 51 años, fue arrestado el pasado 21 de junio cuando custodiaba en un camión 237 kilos de cocaína. Esto era parte de las operaciones logísticas que desarrollaba para carteles mexicanos y colombianos.

Las investigaciones indican que el ex jefe policial comandaba un grupo narcotraficante dedicado a movilizar cantidades no mayores a los 500 kilos de cocaína desde la capital San José hacia pistas aéreas clandestinas en la provincia de Guanacaste.

Lo anterior, para posteriormente sacar la droga por aire hacia el norte del continente. La participación de Pizarro dentro de la estructura era de liderazgo de logística operativa.

Pizarro debía conseguir personas y vehículos para que la droga saliera de un lugar y fuera transportada de forma segura hasta su destino final. Esta ingresaba a Costa Rica aparentemente desde Colombia.

«Él tenía un conocimiento policial de las rutas. No pertenecía a un cartel, sino que su actividad era vender la ruta o el transporte al cartel de droga que mejor le pagara. Esto implica que las drogas se podían mover hacia uno u otro cartel mexicano», dijo a los periodistas el subdirector del Organismo de Investigación Judicial, Michael Soto.

El pasado jueves el caso tomó otro giro que confirmó que miembros del grupo paramilitar de Pizarro se habían involucrado en las operaciones narcotraficantes.

Narco paramilitar en Costa Rica.
Narco paramilitar en Costa Rica.

Las autoridades detuvieron ese día a cuatro sospechosos de integrar la banda narcotraficante; quienes además pertenecieron a la Patrulla 1856 y recibieron de Pizarro un título que les otorgaba la categoría de cabo.

Eso, «por haber aprobado la primera etapa de formación básica de infantería, Técnica de patrullaje y pruebas de valor».

Acciones de Costa Rica

Los arrestados son de apellidos Quesada Salvatierra, Camacho Calderón, Ureña Quesada y Guerrero Pierce. Con ellos, las autoridades han detenido a Pizarro y ocho miembros del grupo narcotraficante, pero las investigaciones continúan.

En los últimos años las autoridades costarricenses han confirmado que el narcotráfico ha penetrado flota pesquera y transporte terrestre para movilizar la droga.

Sin embargo, también fincas agrícolas para camuflar la droga en exportaciones y crear pistas de aterrizaje clandestinas.

Como parte de sus esfuerzos para combatir este flagelo, el Congreso de Costa Rica aprobó esta semana en la primera de dos votaciones requeridas, una ley que crea la Jurisdicción Especializada en Delincuencia Organizada.

Esta jurisdicción tendrá a cargo la investigación y juzgamiento de los delitos graves y contará con un Juzgado Penal. Además, un Tribunal Penal y un Tribunal de Apelación de Sentencia de Delincuencia Organizada.

Costa Rica decomisa anualmente cerca de 20 toneladas de cocaína. Asimismo, cuenta con el apoyo de Estados Unidos para realizar vigilancia en los océanos. Es una lucha que parece no tener fin ante el poderío económico y logístico de las organizaciones criminales.