REDACCIÓN. Inmigrantes han tomado medidas de presión para ser mejor atendidos en el Centro de Detención de Noroeste situado en Tacoma en el estado de Washington (oeste), que recluye a inmigrantes en proceso de deportación.
Este centro ya había sido denunciado anteriormente por malos tratos a inmigrantes. Esta vez las demandas son casi las mismas. Así lo informó el grupo NWDC Resistance, en una carta manuscrita con las demandas.
La huelga de hambre comenzó a medio día con 1,500 internos que se enfrentan a ser deportados. Según la organización que lucha contra las expulsiones de inmigrantes y por la mejora de las condiciones de detención.
Inmigrantes comienzan a recibir apoyo
A través de sus redes sociales han comenzado a difundir mensajes y fotografías. En ellas se muestran algunos de los reclusos en huelga de hambre.
Está el caso de Alejandro Macias que señala: «No nos rendiremos», ¿Qué más nos pueden hacer? Estos abusos tienen que acabar».
También está Israel que dice estar haciendo la huelga de hambre y destaca a quienes se han sumado. Sus demandas incluyen que haya más higiene en la ropa que reciben y que mejoren la calidad de la comida.
Pues según los inmigrantes, todos los días les sirven arroz con frijoles. Además es necesario mejoras en el acceso al servicio médico y se aceleren los procesos judiciales.
También piden que se les incremente el pago de 1 dólar que reciben por trabajar en el centro.
“A algunos incluso se les ha denegado pago del dólar diario y se les ha dado una bolsa de papas fritas a cambio de varias horas de trabajo encerando el suelo de la prisión”, denuncia la organización.
Los inmigrantes dicen que quieren dar a conocer a los ciudadanos las condiciones en las que viven.
El centro fue objeto de atención pública cuando en mayo del 2014 otra huelga de hambre logró sumar el apoyo de 1,200 detenidos.
Respuesta
“ICE respeta totalmente los derechos de todas las personas de expresar su opinión sin interferencia y sin represalia alguna en contra quienes mantienen una huelga de hambre”, señaló Rose Richeson, portavoz del ICE en un comunicado.
La institución no considera que se trata de una huelga de hambre hasta pasadas 72 horas, hasta entonces se servirán las tres comidas diarias que ofrece el centro, según explicó.
“Si detectamos que hay personas que no comen en 72 horas, serán activados los protocolos para gestionar huelgas de hambre”, señaló.
