El revolucionario Félix Cesario registra 947 mujeres en su «libreta del amor»

"Lo cuento no para jactarme, sino para sentir asco por lo que hice en el pasado"

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Félix Cesario
Lo cuento no para jactarme, sino para sentir asco por lo que hice en el pasado.

TEGUCIGALPA. El periodista y abogado Félix Cesario es uno de los íconos del periodismo y revolución en el país. Fue uno de los desaparecidos en la crisis de los años 80 en la Universidad Autónoma de Honduras (UNAH).

Actualmente tiene 74 años y sigue apoyando la causa de los estudiantes de la máxima casa de estudios. Habló con Diario Tiempo, y detalló acerca de su vida personal y de la actual problemática en la Alma Máter.

¿Cómo fue su infancia?

Nací en un pueblo San Francisco de la Paz, Olancho, tengo uso de razón desde los cuatro años. Yo conocí un presidio en mi infancia, pues mi papá en defensa propia hirió a alguien.

Yo me estaba muriendo de tristeza, y me llevaron a ver a mi papá en el presidio. Una parte de mi infancia la pasé «jineteando» caballos en el río Ajuterique.

A los ocho años le ayudé a mi mamá a vender nacatamales en las feria (las ferias más tristes de la tierra). Mi mamá me mandaba a punta de faja a la escuela, porque no me gustaba ir.

Llegué a los 14 años a Tegucigalpa, un 28 septiembre de 1958 y miré el lugar más triste de la tierra. Y desde entonces no he parado de llorar. Luego le tomé el gusto al estudio y logré ser el alumno número uno de todo el país.

¿Félix Cesario y las mujeres?

Lo cuento no para jactarme, sino para sentir asco por lo que hice en el pasado. A mi padre me lo mataron por culpa de una mujer, entonces yo juré en su tumba que toda mujer que yo quisiera iba a ser mía.

Yo no sentía amor ni nada yo solo sentía instinto animal, entonces compré una libreta y las iba anotando. Llegué a completar 947 mujeres hasta que conocí a la argentina, con la que viví diez años y me enseñó que yo era una buena persona.

Y tenía razón, yo soy una buena persona, y me enseñó que yo me estaba haciendo un mal. Ella murió de cáncer, pero la sigo amando. Eso era una enfermedad psicológica. Y fue en 1970 que decidí cambiar de vida.

A mí no es cualquier mujer que me a desubicar sexualmente; tiene que tener algo especial para que me guste sexualmente. Si me ven con varias mujeres en Facebook, pero ellas saben que solo que yo las mimo y las consiento por lo malo que fui.

¿Por qué estudió Periodismo?

Desde que yo tengo uso de razón yo fui periodista yo de niño les hacía cartas de amor a mis compañeros de escuela.

Siempre tuve capacidad de escribir. Yo tenía miedo que al momento de mi muerte nadie se diera cuenta que yo había muerto.

Entonces estando matriculado en la universidad, Medardo Mejía que fue mi segundo padre me dijo estudie periodismo o derecho. Sin estar en la universidad fundé las revistas tribuna sindical que aún sale y revista Frente.

Ya siendo periodista, colaboré como columnista en el diario en Cronista, también colaboré en Diario Tiempo escrito. El periodismo es el oficio más grosero, más «ijuelamadre», pero el más bonito del mundo.

Félix Cesario y la UNAH

¿Quién ha sido el peor rector que ha tenido la Universidad Nacional Autónoma de Honduras?

La actual rectora, haciendo memoria, Oswaldo Ramos Soto, impuso el terror en la universidad, pero respetó las organizaciones estudiantiles.

Ni Oswaldo Ramos Soto, se atrevió a llamar a la policía en la universidad. Nunca se atrevió a dejar entrar a un militar armado a la universidad, Gustavo Álvarez Martínez.

¿Quienes han sido los mejores rectores de la UNAH?

Arturo Quesada, pese a ser de ideología contraria a la mía manejó bien la relación con los frentes universitarios. Jorge Arturo Reina, con la cuarta reforma y en Juan Almendáres Bonilla en tercer lugar.

La historia va a recordar a Julieta Castellanos por los actos que está haciendo, pues la historia es fría. No ha habido otra peor que Julieta Castellanos, se atrevió a meter el ejercito. Lo digo sin odio, sin rencor.

Se va a arrepentir algún día, Dios la ampare.

¿Qué le diría a Julieta Castellanos si estuvieran frente a frente?

Ella me sacó de la escuela de periodismo, a pesar de eso no le guardo rencor, sé que a la larga le voy a ganar la partida.

No la odio, quisiera que Dios la iluminara. Le diría, ya terminó su periodo, ya terminó sálgase. Pida perdón públicamente. Llame a un consejo para que se encargue de la rectoría mientras se elige el nuevo rector.

¿Cuál es la solución a la crisis de la UNAH?

La solución es que Julieta pida perdón, y que cese la criminalización de los estudiantes.

¿Marlon Escoto como rector?

Sería peor que Julieta, recordemos el desastre que hizo en la universidad de agricultura, que aún no ha resuelto. Eso saldría peor la medicina que la enfermedad.

¿Quién sería buen candidato para rector de la UNAH?

Chang Castillo, Olvin Rodríguez y Manuel Gamero serían buenos candidatos, aunque algunos no son de mi línea de pensamiento, pero tienen buenas capacidades.

¿Se siente orgulloso de su hijo?

Mil por mil, de mi hijo y de todos los que han sido mis alumnos, creo haberlos entendido. Y yo les decía díganme compañero no licenciado, porque entendí que los títulos ahí quedan.

¿Qué piensa del Periodismo actual?

Hay una gran decadencia, para el único que puedo escribir es para Diario Tiempo. Me han ofrecido escribir para otros medios escritos, pero no he aceptado por dignidad.

Marcado por la muerte de sus hijas

El periodista Félix Cesario, tuvo cuatro hijos, dos varones y dos mujeres. Las dos hijas del periodista fallecieron, lo que marcó la vida del comunicador.

«La muerte de mi hija me duele tanto que aún lloró y no me da pena», manifestó Cesario.

Ella murió de hepatitis, yo no sabía que había muerto, entonces como mecanismo para aceptar la pérdida el periodista toma juguetes que sus hijos usaron en su niñez.

Por eso se puede ver en el perfil de redes sociales de don Félix imágenes de dichos juguetes. Además, Cesario expresó que un revolucionario que no tiene respeto por las mujeres no es un verdadero revolucionario.

«Nunca hay que perder el ser niño por dentro, lo dijo Jesús mi ejemplo a seguir, un hombre que es como un niño es un hombre noble», detalló el también poeta.

El Ché decía un revolucionario tiene que ser tierno y amoroso como un niño recordó e periodista. El binomio: Cesario hijo y Cesario padre

Uno de los mejores regalos que me ha dado Dios es mi hijo, él es una de las razones de vivir. Es el hombre que más me conoce, es mi razón de vivir. Cuando él se presenta en lugar le preguntan por su padre, somos un binomio.

Lo formé como un hombre recto que no va a hacer algo de lo que me avergüence. Julieta me atacó personalmente al arremeter contra él.