Tegucigalpa.- El joven hondureño Franklin del Cid, más conocido como “El Packy”, quien se encontraba preso en una cárcel de New Jersey, Estados Unidos, salió en libertad el pasado 29 de enero.
En ese sentido, el Packy compartió en exclusiva con Tiempo Digital, su experiencia en la cárcel durante estos casi cuatro meses.
Según dijo del Cid, él fue detenido injustamente por las autoridades migratorias estadounidenses. “Un día me llegó una nota que tenía que presentarme a la corte”, comentó el joven DJ. Lo anterior, le pareció extraño, pero aún así se presentó ante la misma.
“Saliendo de la corte me estaban esperando afuera y me dieron una orden de deportación”, comentó.
Dicha orden, fue extendida después de que un cuñado de El Packy, utilizara sus documentos para ingresar a Estados Unidos de manera ilegal.
“Cuando a él lo agarraron tenía una orden de deportación y nunca se presentó al país”, dijo Franklin. “En el centro de migración me arrestaron y me llevaron a la prisión de inmigrantes”, comentó.
Después de esto, todo fue una historia triste para este hondureño emprendedor, en el país del norte.
“Desde el 11 de noviembre nunca más volví a salir, hasta ahora”, comentó.
Libertad
Afortunadamente, El Packy, logró su libertad comprobando que ha cumplido con los requisitos para residir en este país.
“Estoy casado con una ciudadana americana, tengo tres hijos americanos y pago todos mis impuestos”, aseguró el DJ hondureño.
“Me dijeron que no presentaba ningún tipo de problema con la sociedad” declaró.
En ese sentido, del Cid comentó que el 15 de mayo tiene que presentarse a la corte para obtener definitivamente su residencia.
Experiencia
Definitivamente esta experiencia en la vida de El Packy, marcó un antes y un después en él.
Es de mencionar que antes de haber sido detenido en Estados Unidos, estuvo involucrado en una polémica situación, en la que fue señalado por muchos hondureños.
“La vida me cambió de un momento a otro, algo inesperado”, dijo del Cid.
De la misma forma, comentó que la situación adentro de migración es muy dura; asimismo recordó a cientos de hondureños que están en esa cárcel donde él estuvo detenido. Y quienes pasan por momentos muy duros y lamentables.
El Packy: “Yo hice lo de Kevin con toda la inocencia, y con las ganas de ayudar”
“Es un centro de detención donde psicológicamente quieren que uno pida la deportación inmediatamente”, contó.
“Solo nos daban una hora de recreo, pero dos veces por semana nada más; dormía con la luz encendida y solo nos daban carne una vez a la semana”, compartió.
“La gente les ruega a ellos que los deporten”, comentó.
Que se espera de El Packy desde ahora
Después de haber salido de cárcel, Franklin asegura que su forma de pensar ha cambiado; asimismo, espera trabajar y recuperarse tanto psicológicamente como económica, desde ahora.
“Sentí que la gente pensaba lo peor de mi cuando estaba adentro; porque antes de entrar estaba pasando una situación bastante dura”, comentó.
“Si yo tuviera necesidad o me hubiera robado un cinco del dinero de Kevin me valiera que me tiraran”, dijo, (en relación a su polémica con Kevin Solórzano).
“Yo siento que Dios me ha bendecido porque me ha enseñado a dar y no esperar recibir”, comentó. Asimismo, dijo que la cárcel le ayudó a ordenar sus ideas. Y ahora solo piensa en seguir trabajando. “En este tiempo perdí mucho, amigos, dinero, estoy endeudado, todo era salida y nada de entrada”, dijo.
Pero, confesó que tiene la fe en Dios que se volverá a levantar de nuevo.
“Comienzo con las giras y las presentaciones, a buscar el dinerito que he perdido”, comentó.
El “Packy” y Kevin Solórzano
El hondureño Franklin del Cid, tomó bastante auge después de involucrarse en el sonado caso del universitario Kevin Solórzano.
El “Packy”, reunió una fuerte cantidad de dinero, por medio de personas que donaron el mismo para apoyar a Kevin Solórzano y a su familia.
El problema surgió cuando “Packy” empezó a ser señalado por personas que lo inculpaban de haberse robado tal dinero.
Por su parte, Franklin contrató a un reconocido abogado norteamericano para que apoyara en el caso. Hasta el momento, el joven universitario fue condenado a 33 años de prisión y el caso no le ha favorecido.
