TEGUCIGALPA. Desde finales de junio hasta mediados de julio, la canícula (periodo seco) afectará a Honduras, así lo pronosticaron los meteorólogos del Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos).
A través de medios locales, el pronosticador Mario Centeno dijo que «la canícula solo es una reducción en las lluvias.
«Eso quiere decir que las precipitaciones no desaparecen por completo, pero sí se siente una disminución marcada. Se espera que se presente a finales de este mes y la primera quincena de julio», precisó.
En ese sentido, indicó que a partir de la segunda quincena de julio, las lluvias serán normales en todo el territorio hondureño.
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¿Qué es la canícula?
El fenómeno climatológico de la canícula se caracteriza porque las precipitaciones bajan, mientras aumenta las temperaturas. La canícula dura aproximadamente 40 días aunque puede variar, es decir que puede durar menos o más de ese tiempo.
A esta temporada del año también se le conoce como sequía intraestival o como veranillo y se registran temperaturas de más de 35 grados Celsius. Además, hay un calentamiento excesivo del aire y los cielos están más despejados.
La canícula la causa «la intensificación y desplazamiento al oeste de la alta presión atmosférica semipermanente en el Océano Atlántico, la intensidad de vientos en niveles bajos en el mar Caribe y las circulaciones asociadas», según los expertos.
El calor se puede atenuar en algunas regiones del país con fenómenos naturales como los ciclones o las ondas tropicales.
Según la historia, el nombre de este fenómeno climatológico se debe a la constelación Can Mayor o Canícula porque en la antigüedad se creía que la temperatura incrementaba en el verano gracias a que el calor del sol se unía con la estrella Sirius.
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