El Porvenir, Francisco Morazán. Al menos 200 privados de libertad protagonizaron un amotinamiento la tarde de este jueves en la cárcel de El Porvenir, Francisco Morazán.
Según información, los privados de libertad se amotinaron porque al parecer no cuentan con servicios básicos.
Asimismo, trascendió que los presos piden que se les instalen televisores en cada pabellón.
De igual forma, otra exigencia de los reos es que se mejore la alimentación.
El amotinamiento de los privados de libertad se registró en los módulos tres, cuatro y 14.
Al momento del amotinamiento, agentes de la Policía Nacional, militares y Comandos Especiales (Cobras) se trasladaron al lugar para controlar la situación.
La rebelión de los presos fue controlada y no se reportan pérdidas humanas ni incidentes que lamentar.
Denuncia
Por su parte, familiares de varios privados de libertad de esta cárcel, denunciaron hace algunos días, los malos tratos que sufren los presos en este centro penitenciario.
En ese sentido, exigieron a las autoridades que se tomen las medidas necesarias.
De igual forma, denunciaron que en dicho centro hay varios casos de tuberculosis.
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Al respecto, la portavoz del Instituto Nacional Penitenciario, Digna Aguilar, manifestó que los presos han tenido problemas con el agua. Pero que esta situación se ha logrado resolver con ayuda de cisternas, según dijo la vocera.
La cárcel de El Porvenir está ubicada a unos 70 kilómetros al noreste de Tegucigalpa, capital de Honduras.
Este centro penitenciario alberga a peligrosos pandilleros y líderes de estructuras criminales.
Denuncias de tuberculosis
Hace unos días el comisionado del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), Orle Solís, denunció que está a punto de registrarse una epidemia sanitaria, a raíz de reportes graves de casos de tuberculosis en el Centro Penitenciario de máxima seguridad conocida como “El Pozo I”, ubicado en Ilama, Santa Bárbara.
Recordó que desde hace tiempo el Conapred ha venido recomendando a las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP) y a las autoridades de salud para que mantengan presencia en las instalaciones; precisamente con equipo técnico y con medicamentos para hacerle frente a los episodios de tuberculosis.
